martes, 12 de febrero de 2008

La historia del hombre que sostenía la mirada


Soy el primero que se atreverá a contar la historia del hombre que sostenía la mirada. Así de intimidante, así de simple.

Nadie conoció el nombre del tipo, sólo sabemos que siempre estaba muy bien vestido, saco y corbata al tono y siempre sosteniendo la mirada.

Dicha actitud le trajo alegrías y sinsabores.

No tengo datos concretos, pero la mirada sostenida obtuvo los favores de innumerables señoritas que cayeron seducidas por su mirada penetrante, aunque para la mayoría debe haber sido incómodo que este hombre las mirara media hora en el bondi sin pestañar a treinta cm de su cara.

Con el tiempo se perfeccionó y podía sostener la mirada respirando suavemente y sonriendo a la vez.

Más de una vez tuvo que bajar del colectivo, escapando acusado injustamente de depravado; su objetivo era puro, él sólo buscaba sostener la mirada.

Escapaba el mirador anónimo entre gritos de señoritas y golpes de los hombres pero nada de eso lo amedrentó.

Supo sostener la mirada con varios gatos siameses doblegándolos con el poder de su mirada.

Se comenta que una vez se lo encontró en Egipto sosteniendo la mirada con el ojo de Horus y otra sosteniendo la mirada del tercer ojo del psíquico Uri Geller también obteniendo una resonante victoria.

Pero no todas eran buenas, cierto dìa le sostuvo la mirada a un bebé y el pobre niño terminó ojeado teniendo que pagar a los padres los honorarios de la curandera.

Si bien no había conjuntivitis que lo frenara la cosa se complicaba cuando iba caminado y tenía que sostener la mirada a una persona que pasaba frente a él. Nunca pudo dominar del todo la técnica de sostener la mirada marcha atrás.

En los gimnasios era dificil porque todos estaban en lo suyo y había sido echado de varios, así que decidió sostenerse la mirada a sí mismo frente a los grandes espejos de los gimnasios. Esta actitud, agregada a la sonrisa que aprendió en los colectivos, lo hacía parecer loco y tuvo que pasar varias semanas en El Sauce.

La costumbre del espejo le ocasionó la perdida de su trabajo porque al levantarse se sostenía la mirada frente al botiquín pasando varias horas antes de ir a tomar el desayuno.

Peor suerte corrió al sostener la mirada a una conocida ex reina de la vendimia cuando la joven estaba disfrutando de un café con su novio. El mirador anónimo no calculó que el novio era vigésimo cuarto dan de un arte marcial que no rercuerdo el nombre. Antes de ser duramente golpeado quio sostener la mirada al vigésimo cuarto dan, pero a los tres segundo se desmayó de una llave que solo ellos saben hacer.

Sostener la mirada lo había convertido en un vicio. La gente lo desafiaba y hasta había apuestas. Una vez sostuvo la mirada con el mismísimo Tu Sam ,venciéndolo facilmente.

Traumático fue sostenerse la mirada con un ppagayo en un especial para Animal Planet. El ave, en un acto cobarde cuando el mirador se acercó un poco, le mordió muy fuerte la nariz y tuvo que ser hospitalizado en el Central un mes( no tenía obra social).

Si bien su sueño era medirse con José Feliciano una noticia sacudió su ego.

El campeón australiano de sostenida de mirada lo desafiaba. La contienda sería en la mitad del desierto del Sahara, sin público y por el honor. Nunca más se supo de ellos.

Después de treinta años se encontraron las ropas de ambos. Fue la delegación Beduina de karate do, que andaban cazando lagartijas para el almuerzo.

Nunca más se supo de ellos.

La versión más creíble y la única es que los dos sostenedores de miradas tenían novias que estaban celosas, solo querían que les sostuvieran la mirada a ellas.

Lo mejor de esta historia es que el sostenedor de miradas argentino con el dinero de las apuestas se compró un duplex.

Alguién me dio la dirección, lo guardaré en secreto, sosteniendo la mirada.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

como siempre un gusto eerte
te dejo mi blog para que me conozcas
http://kamaleonrosa.blogspot.com/

Prueba para Alba dijo...

Muy bueno. Ingenioso y bien escrito. Me dio gusto leerlo

la coloradita dijo...

y si sostengo mi palabra??...
Una sorpresa encontrarte por el mundo del bloS...
Un gusto como siempre...
Su admiradora number wan